Finalmente cruzamos en "la barcaza" a conocerla. Aún en pleno verano el viento que corre de Océano a Océano hiela la piel y los huesos. Con mucha suerte el mar estará calmo, nada es predecible en el terreno de la meteorología patagónica.
Hace quinientos años recorrían la Isla sus primeros habitantes, los Selk'nam y los Haush. Es probable que aquellos hombres hayan encendido grandes fogatas que se vieran a la distancia, las que dieron lugar al nombre con que Magallanes bautizara la enorme Isla.